El pan requiere el uso permanente de tecnología para la selección de harinas, fermentación con levaduras y técnicas de cocción.

El pan es uno de los alimentos más consumidos e importantes del mundo. La simple receta es una mezcla de harina y agua para producir una masa que pueda ser fermentada antes de hornear, freír o hacer al vapor. Esta tecnología alimentaria tan simple ha formado parte de la vida cotidiana de miles de millones de personas en todo el mundo durante miles de años.

Ya en la antigüedad aprendieron que procesar harina permite hacer que sea comestible. Así como que la fermentación y el horneado la hacen más digerible.

El descubrimiento de restos carbonizados ha permitido la reconstrucción de la producción temprana de alimentos similares al pan hechos a base de tubérculos y de los antepasados silvestres de los cereales que utilizamos hoy en día. Estos restos encontrados en el noroeste de Jordania, en el área conocida como desierto negro, han permitido datar el origen del pan hace 14 000 años, 4 000 años antes de la aparición de la agricultura en el neolítico.

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